Ante el auge de posturas de extrema derecha, que cuestionan al ecologismo y a la ciencia, un aire fresco nos llega de Europa. La responsable se llama Greta Thunberg , una joven sueca de tan solo 16 años, que el 20 de agosto del pasado 2018 decidió dejar de ir a clase hasta los comicios del gobierno de Suecia. ¿Qué le hizo tomar esta postura? Las olas de calor y los incendios forestales. ¿Qué pedía? Le demandaba al gobierno sueco que redujera las emisiones de carbono, siguiendo lo establecido en el Acuerdo de París. Tras las elecciones generales de su país, la joven Greta continúo manifestándose todos los viernes, de manera pacífica se sentaba a las afueras del Parlamento de Suecia durante toda la jornada escolar. Poco a poco, otros jóvenes fueron sumándose a su iniciativa y, con el efecto de una onda expansiva, sus demandas fueron convirtiéndose en las demandas de muchos jóvenes europeos, que viernes tras viernes hacen huelga y se manifiestan para exigir a nuestros gobernantes que protejan nuestro planeta.

La semana pasada, los jóvenes españoles se sumaron a esta iniciativa y el viernes 15 de marzo las principales ciudades se llenaron de manifestaciones exigiendo responsabilidad para proteger nuestro entorno.

Estos movimientos nos dan esperanza, el ejemplo nos viene de nuestros jóvenes, que están nos están dando a todos una gran lección.

En un post anterior, os hablábamos de nuestro programa No hay Planeta B y nos alegra mucho ver que los jóvenes reivindicaban en sus pancartas que NO HAY PLANETA B y que todo el mundo tiene que se consciente, por nosotros, pero, sobre todo, por las futuras generaciones.

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