El pasado mes de noviembre una niña de once años sufría una violación por parte de seis menores de edad en un espacio público en Badalona. A cualquiera que sea padre o madre y lea este titular, le entran escalofríos y no puede hacer otra cosa que empatizar con la víctima y su familia. Muchos, seguramente también pueden sentir la necesidad de hacer justicia porque una violación siempre es una agresión terrible. Pero si hablamos de una niña de once años la situación empeora muchísimo.
Es muy difícil mantener la mente fría en casos como este, pero es necesario, ya que se trata de un caso complicado pero que nos pone de frente un retrato de nuestra sociedad y hay mucho ángulos y puntos de vista.
¿Qué ocurrió exactamente?
Los hechos se desarrollaron en 6 claves:
- Violada en un centro comercial por seis niños
El 5 de noviembre, esta niña decide ir a un centro comercial sin avisar a sus padres. Cuando llegó, se puso a pasear y mirar escaparates cuando un grupo de seis niños la abordó con un cuchillo y la llevaron hasta unos baños donde la violaron y la dejaron tirada al finalizar.
Para añadir más horror, grabaron la violación.
- Pide ayuda a un vigilante que la ignora
La niña se dirigió a un vigilante de seguridad para pedir ayuda y éste la ignoró, negándose a atenderla. Así que decidió volver a su casa sin contar nada a nadie, creemos que no es necesario hacer hincapié en el estado físico y mental en el que debía encontrarse esta niña, que en absoluta soledad se marchó a su casa sin recibir atención médica ni psicológica de ningún tipo.
- El video de la grabación circula por redes sociales
Pasadas unas semanas, comienza a circular un video con la grabación de la violación por distintas redes sociales. En algunos casos incluso por perfiles de adultos, que, en ningún momento dieron la voz de alarma. Alguien le hace llegar la información al hermano de la niña, también menor de edad y es éste quien avisa a su familia.
- Revictimización de la víctima
Llama la atención que su hermano no acude en modo de auxilio sino a pedir explicaciones a su hermana porque le han dicho que participa en un video de contenido sexual. La niña se derrumba y cuenta todo lo que le sucedió y es entonces cuando sus padres denuncian la violación. Al hacerse público todo el asunto, su hermana relata en diversos medios de comunicación que nadie en casa prestó mucha atención a los cambios que, al parecer después sí reconocieron: pasaba mucho tiempo sola en su habitación, no desayunaba, no estaba alegre…
- Primeras detenciones
Como consecuencia de la denuncia, llegan las primeras detenciones. Para dos de los menores, los que tienen catorce años, la Fiscalía solicita internamiento en un centro cerrado, pero el juez solo lo aprueba para uno de ellos, que resulta además ser reincidente, es decir, tiene antecedentes por agresión sexual, con catorce años.
Para el otro niño implicado de catorce años, se decreta libertad vigilada. En cuanto a los otros tres menores, porque recordemos que hay uno que no ha sido identificado, no se puede realizar ninguna acción, sin embargo, como uno de ellos es compañero de clase del hermano de la víctima, está apartado del grupo y recibe clases de manera individual.
- El caso en los medios de comunicación
La televisión catalana hace público este caso y es entonces cuando el Ayuntamiento de la ciudad toma conciencia de lo que ha sucedido, hasta ese momento parece que no tenían conocimiento, aunque explican que muchas de esos niños son de familias con las que trabajan desde Asuntos Sociales. A raíz de hacerse público, el hermano de la niña empieza a recibir amenazas de muerte y tiene que ser escoltado por la policía.
El alcalde, Rubén Guijarro, interviene en varios medios de comunicación y se indigna sobre lo sucedido y realiza algunas declaraciones como ésta: «Están haciendo su día a día de manera normal mientras tenemos a la familia con la situación que tiene. Esto merece una reflexión, que haya tres energúmenos que campen a sus anchas y que hagan su día a día normal ante esta situación nos tiene que hacer reflexionar, pese a su condición de menor”.
¿Qué ha fallado?
Ha fallado todo. Vayamos analizando desde el inicio.
- La desconexión de una niña de tan solo once años con su familia. Crianzas basadas en el desapego, la falta de comunicación y confianza. Es necesario educar desde el respeto y el apego seguro.
- La falta de empatía y humanidad, por no hablar de la falta de profesionalidad, del vigilante del centro comercial. Pero también nos llama esa falta de sensibilidad y de respeto hacia la infancia, porque…¿y si hubiera sido una mujer adulta habría actuado igual?
- Mal uso de las redes sociales, seguimos pensando que se trata de algo irreal, no hay un uso responsable, por los menores por supuesto que no, pero es que lo visionaron adultos. Por otro lado, ¿qué valores ofrecemos para no hacernos responsables de denunciar cuando vemos algo así? ¿Cómo no educamos para denunciar las injusticias?
- La sombra del machismo es muy larga: un hermano que va a pedir explicaciones a su hermana porque le han comentado que sale un video sexual.
- De los seis menores implicados, resulta que hay un reincidente con catorce años, que ya había estado internado anteriormente, pero que evidentemente los programas de reeducación no han funcionado.
- Niños, se trata de niños y no debemos olvidar esto, por muy ogros que nos puedan parecer. Son víctimas, sin quitar un ápice de horror a la situación y sin faltar el respeto a la víctima principal. Hay que ampliar el foco cuando hablamos de acosadores, es necesario que ampliemos el enfoque y que se haga un trabajo más sistémico teniendo a las familias como eje central.
- Los políticos copan el espacio y se lanzan a realizar declaraciones en las que juzgan y señalan con el dedo a menores de edad, saltándose el trabajo que probablemente están haciendo los profesionales que trabajan con colectivos en riesgo de exclusión social.
Nunca debería haber sucedido algo así, la vida de esta niña ha cambiado y ya nunca será lo mismo. Deberíamos reflexionar colectiva e individualmente sobre cómo estamos educando, no podemos dejar a una parte de la sociedad atrás, tenemos que educar en valores si queremos construir sociedades justas y sostenibles.